Las Enfermedades de Transmisión Sexual son infecciones que se pueden contraer durante las relaciones sexuales.
Algunas ETS son causadas por bacterias y otros por virus.
Siempre es recomendable acudir al especialista o ginecólogo en caso de sospechar una infección que pueda afectar al aparato reproductor.
En el Instituto Dra. Gómez Roig disponemos de especialistas en ginecología y expertos en ETS dentro de nuestros servicios médicos.
Prevalencia de las ETS
Las enfermedades de transmisión sexual ETS, constituyen un problema de salud pública a nivel mundial.
Según la Organización Mundial de la salud, la OMS, más de un millón de personas se infectan a diario.
Se estima que cada año se producen más de 340 millones de casos nuevos tratables en la población entre los 15 y los 49 años.
Las ETS son infecciones causadas por Treponema Pallidum, Neisseria Gonorrhoeae o Gonococo, Chlamydia Trachomatis y Trichomonas Vaginalis.
Además, más de 500 millones de personas padecen el virus del herpes simple o genital, VHS.
Y más de 290 millones de mujeres están infectadas por el virus del papiloma humano, VPH.
En la Unión Europea se produce un descenso progresivo de las ETS hasta la década de 1990. Atribuido sobre todo a los cambios de conducta tras la aparición del SIDA, VIH.
En cambio, a partir de 1996 se incrementan los casos declarados de Gonococo.
Por otro lado, las infecciones por sífilis, clamidias, herpes genital y las verrugas genitales también se han incrementado en los últimos años.
Actualmente, la Clamidia es la ETS bacteriana más notificada en toda Europa.
Mientras que, la Tricomoniasis, infección causada por el parásito Trichomonas vaginallis, es la ETS no viral más común.
Las ETS pueden producir Infecciones Vaginales y vulvares, es decir vulvovaginitis, e incluso ascender por el tracto genital femenino y provocar infecciones del útero y de las trompas de Falopio.
Causas de las enfermedades de transmisión sexual
Las causas de las enfermedades de transmisión sexual incluyen infecciones por bacterias y otras veces por virus.
Las más comunes son infecciones por:
- Clamidia.
- Gonorrea o gonococo.
- Mycoplasma genitalium.
- Herpes genital, también llamado virus herpes simples o VHS.
- Verrugas genitales, también llamadas verrugas del virus del papiloma humano o VPH.
- Hepatitis A, B y C.
- Sífilis.
- Tricomoniasis o Tricomonas.
- Virus de la inmunodeficiencia humana, VIH o SIDA.
Muchas de las ETS pueden transmitirse a través de cualquier tipo de sexo. El VIH y la hepatitis pueden transmitirse también por la exposición a fluidos corporales.
¿Quién se debe examinar?
Se debe examinar y hacer las pruebas para descartar las ETS la gente con factores de riesgo o con sintomatología de infección.
Se recomienda realizar la citología en la revisión ginecológica para detectar cáncer de cuello uterino asociado al VPH.
Las mujeres que han tenido relaciones sin preservativo con más de una pareja deben ser examinadas.
Los hombres y mujeres que tienen relaciones, y no tienen un compañero estable, o tienen relaciones con más de una pareja deben examinarse de manera periódica.
Se debe visitar toda persona que haya tenido relaciones sexuales con una persona infectada con algún tipo de ETS.
Grupos de riesgo de enfermedades de transmisión sexual
La valoración del riesgo individual para ETS es fundamental y requiere realizar una historia clínica completa.
Haciendo hincapié en: las conductas sexuales, historia previa de ETS, historia reproductiva: anticoncepción, embarazos y protección, drogas y vacunas.
Población más vulnerable
Las población más vulnerable, y con mayor número de factores de riesgo, varía de una zona a otra, pero hemos de prestar mayor atención ante:
- Conductas de riesgo: Hombres que tengan relaciones sexuales con hombres, que tengan múltiples compañeros sexuales y practiquen el coito anal sin protección. Jóvenes menores 25 años activos sexualmente con distintas parejas. La prostitución; turismo sexual; drogodependientes, presidiarios, etc.
- Riesgo de exclusión social: Refugiados, víctimas de violencia sexual, niños y jóvenes sin hogar.
- Embarazadas: La importancia de las infecciones en este grupo hace necesario un cribado en el primer trimestre protocolizado en el control del embarazo. En la primera analítica se descartan algunas de estas infecciones.
- Infección por el SIDA, VIH: La relación de las ETS con la infección por VIH es estrecha y bidireccional. Presencia de VIH puede modificar la presentación clínica de las ETS, con un impacto importante en la gravedad. Las ETS incrementan el riesgo de coinfección con VIH debido a varios motivos: por un lado, a las conductas de riesgo que suelen presentar los pacientes y, por otro lado, a la presencia de lesiones que actúan como puerta de entrada.
Actualmente se indican cribados de las infecciones de transmisión sexual en poblaciones de riesgo.
Estos estudios incluyen la detección de Clamidia, Gonococo y Trichomonas. También es frecuente solicitar un despistaje de VIH, sífilis, virus de la hepatitis B y además virus de la hepatitis C a todos los pacientes con factores de riesgo.
También se debería cribar a las personas que tengan ladillas en los genitales. Las ladillas o piojos púbicos se contagian a través del contacto sexual.
Las personas con ETS tienen más probabilidad de contraer ladillas.
Al mismo tiempo se estudia el virus de la hepatitis A en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres o pacientes con prácticas de riesgo para esta infección.
Por otro lado, es imprescindible destacar la importancia del cribado del virus del papiloma humano, VPH, debido a su papel en la prevención del cáncer de cuello uterino.
Qué síntomas puedo tener
En general, debes vigilar cualquier tipo de picor genital, ardor, llagas o secreción. Ten en cuenta que muchas ETS no causan ningún síntoma.
Si tienes una enfermedad de transmisión sexual, necesitarás tratamiento que puede incluir antibióticos o medicamentos llamados antivirales.
El tratamiento curará la infección o evitará que empeores. También reducirá las posibilidades de que contagiar a otros.
La candidiasis genital o la candida vulvovaginal, que también dan picor en la vagina o en la vulva, no se considera una ETS.
Prevención de las Enfermedades de Transmisión Sexual
Históricamente, la epidemia de SIDA, VIH, a nivel mundial dio la alerta de la magnitud del problema y de la necesidad de una educación sexual como el principio de una prevención correcta.
Debido al SIDA, se propusieron las recomendaciones ABC que significan: abstinencia; be faithful, que se refiere a la monogamia como factor protector y condom o preservativo.
Con el tiempo, se han ido renovando los consejos con el fin de optimizar la prevención de diferentes ETS.
En este contexto, es necesario abordar la educación sexual como medida principal y dirigirse a los jóvenes, con el fin de asegurar una buena prevención.
Las medidas de prevención pueden estar dirigidas a la prevención primaria, la prevención secundaria o terciaria.
Tipos de prevención
A la hora de la prevención de cualquier enfermedad se habla de:
- Prevención primaria: Evita la adquisición de la enfermedad mediante la vacunación, la eliminación y control de los factores de riesgo, educación sanitaria, etc.
- La prevención secundaria: Encaminada a detectar la enfermedad en estadios iniciales en los que el tratamiento puede implicar la curación o progresión de la enfermedad.
- Prevención terciaria: Incluye las medidas dirigidas al tratamiento y a la rehabilitación de una enfermedad para ralentizar su progresión y, con ello la aparición de complicaciones intentando mejorar la calidad de vida.
En las enfermedades de transmisión sexual, ETS, la prevención más importante es la primaria ya que algunas de estas enfermedades son incurables.
Igualmente, la importancia de la prevención secundaria no es menospreciable pues en el caso del virus del papiloma humano,VPH.
Su cribado mediante citología juega un papel importante en la prevención de la enfermedad maligna del cuello uterino.
Prevención primaria
Existen muchos Programas de Salud Pública e iniciativas para informar de cómo se puede evitar contraer una ETS.
- Vacunación
- Vacuna del virus de la hepatitis B, VHB: Desde 1982 se dispone de vacuna contra el VHB, con una eficacia del 95%. En 1993 se añade en el calendario vacunal para los adolescentes y en 2005, para los recién nacidos de las embarazada que están infectadas.
- Vacuna del virus de la hepatitis A, VHA: Se recomienda en personas con prácticas de riesgo. Especialmente en hombres que tienen sexo con hombres y turismo sexual.
- Vacuna del virus del Papiloma Humano, VPH: Está incluida en el calendario vacunal desde el 2007. Existen tres vacunas. Las tres protegen de la infección de los subtipos cancerígenos más frecuentes del VPH, el 16 y el 18, y están autorizadas en España a partir de los 9 años. Actualmente en Cataluña, la vacunación se realiza en niñas de 11 a 12 años y recomendada en niños, pero no financiada. También está recomendada en casos de conización por patología cervical, en hombres que tienen sexo con hombres, promiscuidad o infección por VIH.
- Métodos barrera
Hay pruebas suficientes de que los preservativos, si se utilizan de manera correcta y sistemática, protegen eficazmente contra la transmisión del SIDA. Además reducen la transmisión de otras muchas ETS: sífilis, clamidia, gonococo, etc.
Aunque el preservativo femenino es eficaz y seguro, presentando una mayor prevención frente al VPH que el masculino. No ha alcanzado su pleno potencial en los programas de prevención porque su coste es relativamente elevado.
Se están realizando pruebas destinadas a evaluar la eficacia de los diafragmas para proteger el cuello uterino contra la infección por SIDA y otras ETS.
Prevención secundaria y terciaria
Las prevenciones secundaria y terciaria deben estar destinadas a ofrecer intervenciones eficaces para las personas con ETS para prevenir nuevas infecciones y también complicaciones a largo plazo.
Para ofrecer esta prevención es esencial detectar las personas infectadas y realizar un cribado óptimo según:
- Historia de la enfermedad conocida.
- Tratamiento efectivo en la etapa pre-sintomática.
- Test sencillo, rápido, poco invasivo, coste-efectivo y de buen rendimiento.
- Población bien informada donde la enfermedad sea prevalente.
La vigilancia epidemiológica de las infecciones de transmisión sexual en Cataluña utiliza sistemas de notificación obligatoria.
En Salud Pública, uno de los principales motivos para considerar una enfermedad de declaración obligatoria. Es la posibilidad de disponer de medidas de prevención para reducir la transmisión a los contactos.
El estudio de los contactos es el proceso por el cual las parejas sexuales de un paciente diagnosticado de una ETS son identificadas e informadas de su exposición.
Se ofrece atención y tratamiento a las parejas sexuales, con unos claros beneficios clínicos: evitar la reinfección del caso inicial.
Diagnosticar y tratar a parejas infectadas generalmente asintomáticas. Romper la cadena de transmisión de la infección de transmisión sexual a nivel poblacional.
Es clave realizar el estudio con la mayor brevedad posible y tener en cuenta pruebas diagnósticas para descartar otras enfermedades de transmisión sexual.
Clamidia
La Infección por Clamidia, Chlamydia Trachomatis, se ha convertido en la ETS bacteriana más frecuentemente diagnosticada en Occidente en las dos últimas décadas, principalmente en países desarrollados.
Según el informe de vigilancia de la ECDC: European Centre for Disease Prevention and Control, esta infección es la enfermedad más declarada en la Unión Europea.
En 2016 se estimaba una incidencia de 185 casos por 100.000 habitantes.
Persistiendo la tendencia al aumento.
Este hecho se explica en gran parte por la implantación de programas de cribado. Además de la mejora de los métodos diagnósticos y los sistemas de vigilancia.
En Cataluña, la tasa global de Clamidia se ha incrementado pasando de 9,5 casos por 100.000 habitantes en 2011 a 55 casos en 2016. Siendo dos veces superior en mujeres que en hombres.
El período de incubación se sitúa entre las 2 y 6 semanas, por lo que la infección se puede transmitir durante el período asintomático.
Como complicaciones, la Clamidia puede producir patología ginecológica como la enfermedad inflamatoria pélvica, la cual tiene implicaciones en la fertilidad femenina.
Su detección se recomienda en:
– Mujeres con leucorrea, cuyo tratamiento ha fracasado.
– Las mujeres con flujo anormal postparto o después de un aborto.
– Flujo vaginal anormal con un dispositivo intrauterino, DIU, de 3 semanas.
– Embarazadas de 25 años o menores de 25 años.
– Sospecha de enfermedad inflamatoria pélvica.
Gonococo
La infección por Gonococo, Neisseria Gonorrhoeae, es una de las enfermedades de transmisión sexual bacterianas más prevalentes junto a la Clamidia.
De hecho, su incidencia ha ido en aumento durante los últimos años.
A partir del 2010, según European Centre for Disease Prevention and Control. Se describe un total de 12,6 casos cada 100.000 habitantes en 2011.
La infección de Gonococos es más prevalente en hombres, sobre todo homosexuales.
En Cataluña, la tasa global de gonococo se ha incrementado pasando de 5,3 casos por 100.000 habitantes en 2007 a 38 casos por 100.000 habitantes en 2016.
Comparativamente, el incremento de los casos es mayor en mujeres que en hombres.
Además, se ha visto un aumento importante en la incidencia en hombres que tienen sexo con hombres.
La detección del Gonococo se realizará en los mismos casos que la Clamidia.
El cribado, en los casos femeninos, se recomienda en:
– Mujeres de 25 años o menos que sean sexualmente activas.
– Riesgo de contraer ETS, especialmente con riesgo de gonococia.
– Diagnosticadas de otras enfermedades de transmisión sexual.
– En parejas sexuales de personas infectadas por Gonococo.
– Embarazadas con riesgo alto de infección por Neisseria Gonorrhoeae en el primer trimestre, y también en el tercer trimestre si el riesgo sigue siendo alto.
Sífilis
Infección por Sífilis, Treponema Pallidum, representa la tercera enfermedad de transmisión sexual más declarada en la Unión Europea.
La Sífilis se caracteriza por presentar un curso fluctuante. Con fases de actividad separadas por periodos de latencia o descanso.
Esta bacteria puede producir complicaciones obstétricas graves. Además de implicaciones fetales por sífilis congénita.
Su incidencia ha ido en aumento progresivo durante los últimos diez años aun disponiendo de un tratamiento eficaz y económico.
La tasa global de sífilis ha aumentado en Cataluña desde 2007 a 2016, pasando de un 3,2 por cada 100.000 habitantes a 20,6 casos por 100.000.
Se ha observado que este incremento ha sido tres veces superior en hombres que en mujeres.
Las indicaciones de detección y cribado de la Sífilis en mujeres se recomiendan en:
– Úlceras o lesiones sospechosas de Sífilis.
– Parejas sexuales de personas con Sífilis.
– Mujeres asintomáticas con alto riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.
– Diagnosticadas de otras ETS.
– Todas las embarazadas.
– Recomendada en mujeres infectadas por SIDA, VIH.
Virus del Papiloma Humano, VPH
La infección por el Virus del Papiloma Humano, VPH, es la infección de transmisión sexual más frecuente a nivel mundial.
Una mayor incidencia se da en los primeros años de vida sexual tanto en hombres como en mujeres.
La presencia de este virus afecta en un 20-30% a mujeres menores de 30 años.
Se estima que el 80% de las mujeres sexualmente activas contactan con al menos un tipo de VPH en algún momento de su vida.
Además, es importante tener en cuenta que el 80% de estas infecciones son transitorias y se resuelven espontáneamente en un año.
La importancia del estudio del virus del pailoma humano, VPH, radica en las patologías que pueden producir: verrugas vulvares y genitales, o lesiones premalignas y también cáncer ginecológico.
De hecho, se estima que VPH está involucrado en el 5% global de los cánceres y en las mujeres supone el 10% de ellos: cáncer de cérvix, ano, vagina, pene, orofarínge, etc.
Concretamente el cáncer de cérvix es el 2º más frecuente entre las mujeres de 15 a 44 años. Diagnosticándose unos 500.000 casos anuales en el mundo y, constituyendo la 3ª causa de muerte por cáncer.
Por este motivo, actualmente se recomienda la realización de citologías a las mujeres entre 21 y 65 años. Con el objetivo de prevenir la aparición de lesiones cancerígenas.
Las nuevas guías plantean como alternativa la posibilidad de detección del VPH en mujeres entre 30 y 65 años.
Virus del Herpes Simple, VHS
El Virus del Herpes Simple, VHS, es la causa más frecuente de úlcera vulvar en la población sexualmente activa de los países desarrollados.
Existen dos tipos de familias de VHS: el tipo 1 y el tipo 2.
El tipo de transmisión de las dos familias de VHS es diferente:
- VHS-1: transmisión oro-labial.
- VHS-2: vía sexual y genital.
Aunque la vía de transmisión suele ser diferente, los dos tipos pueden provocar herpes genital.
En los últimos años, se ha descrito un aumento de la infección.
En gran parte debido a los cambios socioculturales, cambios de la práctica sexual de los adolescentes con contacto oro-labial y oro-genital. Como también al desconocimiento de las enfermedades de transmisión sexual, ETS, por presentarse asintomáticas en algunos casos.
La Organización Mundial de la Salud, OMS, describe que en todo el mundo hay 417 millones de personas en edad reproductiva infectadas por VHS-2 (11%).
En Cataluña, la tasa global de herpes simple se ha incrementado, pasando de 5 casos por 100.000 habitantes en 2011 a 11 casos en 2016.
Este incremento ha sido el doble en mujeres que en hombres.
En el caso de VHS-2 se piensa que es debido a una mayor eficiencia de transmisión del varón a la mujer y en VHS1 por la práctica de sexo oral.
Se recomienda el cribado en parejas sexuales de personas con antecedentes de herpes genital, especialmente en embarazadas.
Asimismo, se recomienda la tipificación del VHS a quienes presentan herpes genital por primera vez.
Tricomoniasis
La Tricomoniasis es la ETS no viral más común en la población. Está causada por un parásito llamado Trichomonas vaginalis.
Se transmite a través de las relaciones sexuales.
Y puede afectar tanto a hombres como a mujeres.
En las mujeres el parásito reside en el tracto genital. En los hombres se puede encontrar en la próstata o en la uretra.
La infección en hombres suele ser asintomática, mientras que, en las mujeres, la infección puede ser asintomática o causar síntomas más graves.
A día de hoy, también se han reportado casos de transmisión vertical (madre a hijo).
La tricomoniasis no tratada puede durar de meses a años.
En las mujeres embarazadas se ha relacionado la presencia de la infección con la ruptura prematura de membranas, partos prematuros y crecimiento intrauterino restringido (CIR).
Parece ser, que la infección por trichomona vaginalis aumenta el riesgo de contraer VIH y VPH.
En mujeres con infección por VPH incrementaría el riesgo de cáncer de útero, y en hombres de próstata.
A pesar de que la Tricomoniasis es poco conocida, es bastante común y podría dejar secuelas graves. Por tanto, si aparecen síntomas o se sospecha de otra ETS se debe de hacer el cribado para poder prescribir el tratamiento adecuado.
Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) y SIDA
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es el causante de la Infección por VIH. El VIH es un lentivirus de la familia de los retrovirus.
Este virus ataca al sistema inmunitario de la persona infectada, y si no se trata, puede causar el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
El VIH está asociado a otras enfermedades de transmisión sexual. Es decir, se contrae con mayor facilidad si existen lesiones causadas por otras ETS.
Por ejemplo, las lesiones ulcerosas causadas por el sífilis o el herpes genital, pueden ser una puerta de entrada para este virus.
Una persona infectada por VIH puede transmitir la infección a través de la sangre, líquido preseminal, semen, secreciones vaginales y leche materna.
Existe tratamiento eficaz para poder llevar una vida normal y saludable y al mismo tiempo proteger a las parejas de las personas infectadas.
Se recomienda administrar tratamiento antirretroviral (TAR) a todas las personas infectadas por VIH para evitar la progresión de la enfermedad y disminuir la transmisión del virus.
En la actualidad existe una práctica de conductas muy peligrosas con personas infectadas por VIH.
Hay personas hoy en día que adquieren la infección por VIH de forma consciente. Es muy popular entre hombres que tienen sexo con otros hombres.
La prevención de la infección por VIH consiste en la reducir las prácticas de riesgo y la utilización del preservativo.
Es importante seguir concienciando a la población de la gravedad de las enfermedades de transmisión sexual.
Hoy en día se recomienda hacer la prueba de VIH a todas las personas que lo solicitan. También a mujeres que quieren quedarse embarazadas, durante el embarazo, ante una sospecha de exposición de riesgo o si se ha sufrido de un contagio por ETS. Del mismo modo, mujeres que han sufrido una agresión sexual o prostitución.
Video
Controles y Pruebas
En el Instituto de la Dra. Gómez Roig realizamos los controles y pruebas necesarias para diagnosticar los casos de ETS.
Si tienes molestias o problemas no dudes en consultar a nuestro equipo, quien te atenderá con profesionalidad.
Te ofrecerá recomendaciones de prevención y además el tratamiento más adecuado en caso de necesidad.
Es importante realizar los controles, seguimientos de contactos y tratamientos adecuados de las Enfermedades de Transmisión Sexual.
Donde nos puedes encontrar
Otras entradas de interés
- Sobre el Autor
- Últimas Entradas
Jefa de Servicio de Obstetricia y Ginecología en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona. Profesora Agregada de Obstetricia y Ginecología y Coordinadora del Sexto Curso de Medicina en la Universidad de Barcelona, UB. Directora del Instituto Dra. Gómez Roig y Coordinadora de Procesos Obstétricos y Ginecológicos de la Clínica Corachan en Barcelona.