Los sofocos en la menopausia, o calores de aparición brusca que te invaden el cuerpo acompañados de sudoración, son síntomas frecuentes.
Cuando hablamos de cambios bruscos de humor, sofocos repentinos, sudores nocturnos, sequedad e irritación vaginal.
¿Te sientes familiarizada con alguno de estos síntomas?
En caso de haber detectado uno o varios de ellos, y no te viene la regla, tenemos una noticia para ti: estás entrando en una nueva etapa de tu vida llamada menopausia o climaterio en su fase previa.
Entrar en la menopausia no tiene porque ser algo negativo. Ya que más bien nos indica que estamos empezando un nuevo ciclo en la vida, en el que ya no será necesario preocuparse por las molestias de la regla ni por los diferentes útiles para sobrellevarla cada mes.
No obstante, muchas mujeres detectan al mismo tiempo irregularidades en su ciclo. Así como síntomas que están empezando a aparecer en su cuerpo, los cuales pueden ser molestos y muy notorios.
Estos síntomas son muy diversos, pero hay uno por excelencia. El rey de todos los síntomas que casi el 80% de las mujeres detectan en algún momento. Hablamos de los tan famosos y temidos sofocos.
Cuando los sofocos ocurren por la noche, las mujeres generalmente los describen como sudores nocturnos.
En el Instituto Dra. Gómez Roig disponemos de especialistas en Ginecología expertos en la menopausia que te ayudaran a sentirte mejor. Así como disminuir las molestias asociadas a esta nueva etapa de tu vida.
¿Por qué tengo sofocos?
El cese de la regla es proceso natural por el cual todas las mujeres del mundo van a pasar, da igual su religión, ideología o etnia. Esta etapa de la vida llegará a ellas, pero la pregunta más realizada por ellas es sin lugar a dudas ¿por qué? ¿qué le está pasando a mi cuerpo?
Es importante conocer el origen del cese de la regla, y para ello hay que empezar por reseñar el hecho de que, a lo largo de la vida fértil de la mujer, sus niveles de estrógenos van disminuyendo progresivamente hasta tal punto que se produce la menopausia.
En esta etapa tanto la progesterona como los estrógenos se ven muy afectados provocando un desequilibrio hormonal.
El desequilibrio hormonal resultante de una disminución tan fuerte de estas hormonas es el causante de que el centro termorregulador del cuerpo. Localizado en el hipotálamo que es una glándula del cerebro, se vea afectado.
Este hecho provoca que nuestra temperatura corporal aumente de forma brusca y además sin previo aviso ni motivos aparentes para la mujer. Dando lugar a lo que conocemos como los famosos sofocos en la menopausia.
¿Cuánto tiempo duran los sofocos en la menopausia?
La duración de los sofocos en la menopausia viene determinada por muchos factores. Entre ellos la raza y el peso de la mujer, el cual puede interferir en su duración e intensidad de los calores.
Los sofocos suelen comenzar como una sensación repentina de calor centrada en la parte superior del pecho y la cara que rápidamente se generaliza. La sensación de calor suele durar de dos a cuatro minutos, a menudo se asocia con sudoración abundante y ocasionalmente palpitaciones, y en ocasiones va seguida de escalofríos y una sensación de ansiedad.
Tras varios estudios se ha llegado a una cifra media de afectación que representa aproximadamente al 80% de la población femenina.
En este estudio se ha detectado que los síntomas de la menopausia estarán presentes y serán un compañero de viaje durante un mínimo de 7 años. Los cuales también pueden prolongarse más años en algunos casos.
En cualquier caso, este dato que arroja el estudio es muy ambiguo pues cada mujer es distinta a nivel hormonal y corporal. Por lo que la duración puede ser menor a esos 7 años o incluso mucho mayor.
Por dicho motivo, no es de extrañar que existan casos de mujeres que apenas tienen síntomas o que han sufrido estas molestias durante un período de tan sólo 6 meses.
Lo importante es, nunca caer en estados de depresión, ansiedad, o baja autoestima, en este momento de nuestra vida.
La mejor solución para manejar de manera correcta lo que nos pasa es conocer nuestro cuerpo y saber que herramientas hay a nuestro alcance para paliar las molestias del climaterio.
Hemos de conseguir vivir de manera agradable y con buena calidad de vida.
¿Qué puedo tomar para los síntomas de la menopausia?
Cuando se empiezan a notar los primeros síntomas de la menopausia, lo primero que se debe hacer es acudir a un profesional o especialista en la materia, en este caso concreto hablamos del ginecólogo.
Los calores o sudores nocturnos tienen un impacto negativo en la calidad de vida, así como una asociación con indicadores de salud adversos: mayor riesgo cardiovascular y mayor pérdida ósea o recambio óseo.
El propio ginecólogo dará los consejos y pautas a seguir, de la misma forma que él mismo será el encargado de recetar los medicamentos necesarios para cada caso en función de su historial médico y sus síntomas específicos.
Es importante hacer hincapié en este punto ya que muchas mujeres deciden automedicarse a raíz de consejos de otras mujeres o por información que han obtenido de fuentes externas.
Hacer esto es realmente peligroso ya que el cuerpo en ese momento está sufriendo un cambio importante a nivel hormonal.
Y lo último que se debe hacer es introducir fármacos que no sabemos realmente cómo actúan con nuestro organismo. Pudiendo conllevar problemas futuros realmente graves de salud.
¿Cómo quitar los calores de forma natural?
Una vez realizada la visita de rigor al ginecólogo, es cierto que hay varias pautas o trucos naturales para paliar los calores. A continuación, comentamos los más famosos:
Consumir soja natural
La soja natural es un ingrediente que ha cobrado especial popularidad en los últimos años, en este caso también nos va a ser de gran ayuda. Gracias a su alto contenido en isoflavonas, las cuales actúan de forma similar al estrógeno, los síntomas se podrán reducir de forma considerable.
Recuerda que se debe consumir en su estado más puro, es decir, la soja que no se ha tratado.
Tomar salvia
Las hojas de salvia esconden tras de sí uno de los mejores remedios para la sudoración. Resulta que varios estudios han detectado que tomar salvia ayuda en gran medida a reducir la sudoración tan fuerte que se tiene durante esta época.
No obstante, hay que tener cuidado con consumir el aceite esencial de la misma, pues si se ingieren altas dosis puede ser peligrosa.
Aceite de onagra
Este compuesto es muy famoso por su alto contenido en ácidos grasos del tipo omega-6 y gamma-linolénico, los cuales se han demostrado que ayudan a mejorar los sofocos y su intensidad. Aunque desgraciadamente no la frecuencia de estos. Este aceite se toma a través de unas cápsulas que lo contienen, se suelen encontrar en herbolarios y tiendas de productos naturales, aunque en algunas farmacias también se pueden adquirir.
Estos son sólo tres de los muchos alimentos naturales que nos comentaran que pueden ayudarnos a mejorar los sofocos en la menopausia. Otros como el trébol rojo, el lúpulo, la valeriana o incluso el azafrán también serán de gran ayuda en esta lucha.
A pesar de que todo esto se ofrezca a nivel social y en el mercado farmacéutico, científicamente hablando, las terapias a base de plantas tienen una eficacia que no ha sido del todo bien establecida. Pueden mejorar la sensación, pero puede ser que no los remedien por completo.
Otras terapias complementarias que se han estudiado con resultados también inconsistentes incluyen la acupuntura, las terapias basadas en el cuerpo y la mente, la respiración controlada, la pérdida de peso y el ejercicio.
¿Qué es bueno para los sofocos?
A estas alturas ya habrás podido detectar que tratar los sofocos en la menopausia no es ninguna broma.
Después de haber ido al ginecólogo y hacer pequeños cambios en la dieta diaria se pueden ver mejoras significativas en la intensidad de los mismos. No obstante los expertos recomiendan una serie de pautas que se alejan de los fármacos y los cambios de dieta que pueden ser de gran ayuda.
Entre estas recomendaciones que se comentan, la más sencilla y fácil de hacer es mantener todas las estancias bien ventiladas. Lo cual es bastante lógico si se piensa, además es conveniente evitar los cambios bruscos de temperatura, así como dejar de lado el uso de varias capas de ropa en invierno, lo cual podría empeorar los sofocos en determinados momentos.
Otros consejos útiles en evitar parte de su aparición es llevar una vida tranquila, relajada, y evitar el consumo excesivo de sustancias estimulantes como el café y el te. Dejar de fumar también es importante. El estrés aumenta la frecuencia y la afectación de los calores.
Una dieta saludable también ayuda a tener menos bochornos. Evitar los alimentos fritos y comidas con excesos, alcohol, tabaco, también ayuda.
Finalmente, una recomendación general para llevar mejor los sofocos es mantener una vida social e intelectual activa. Aunque pueda parecer poco productivo este consejo, lo cierto es que mantener una salud mental buena y una actitud correcta, pero sobretodo positiva ante estos nuevos cambios que ocurren en nuestro cuerpo ayudan a que transcurran de una forma más agradable y menos notoria.
Consulta a nuestro equipo
Si empiezas con sofocos en la menopausia y no te encuentras como a ti te gustaría, no dudes en consultar a nuestro equipo de ginecólogas y ginecólogos, que te ayudaran a encontrar un equilibrio que te permita tener mejor calidad de vida.
No te debes conformar con aquello que pueda parecer natural, pues siempre uno se puede sentir mejor si está bien asesorado y acompañado.
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- Sobre el Autor
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Jefa de Servicio de Obstetricia y Ginecología en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona. Profesora Agregada de Obstetricia y Ginecología y Coordinadora del Sexto Curso de Medicina en la Universidad de Barcelona, UB. Directora del Instituto Dra. Gómez Roig y Coordinadora de Procesos Obstétricos y Ginecológicos de la Clínica Corachan en Barcelona.
Buenas noches. Tengo 17 años. Hace unos días me empezó a doler el seno izquierdo y lo siento hinchado y afiebrado. También me duele la la parte baja de mi abdomen y me baja muy poco flujo como blanco.
Hola. Ante una molestia del pecho en un solo seno siempre es mejor consultar al especialista. El dolor abdominal, junto el dolor en el pecho y la bajada de flujo puede relacionarse con cambios hormonales, frecuentes a tu edad, pero es mejor consultarlo.
Buenos Días, estoy por cumplir 47 años y en lo que va de año solo vi la menstruación el mes de febrero. Solo 4 días pero puras manchas. Cuando tengo relaciones con mi pareja el usa condón, pero tengo mucho dolor en los senos especialmente en los pezones desde el 15 de mayo. He sentido punzadas en el vientre, la última vez que tuvimos relaciones fue el 07 de Mayo.
¿Estos síntomas pueden estar asociados a la pre-menopausia?. Mi menstruación durante el 2020 fue bastante irregular ya que tuve ausencia de menstruación hasta por dos meses seguidos. A la espera de su respuesta, de antemano muchas gracias.
Hola. Lo que explicas puede relacionarse con la pre-menopausia. Irregularidades hormonales pueden dar las sensaciones que explicas. Es molesto, pero irá cambiando y variando según las hormonas.
Gracias por responder..
Adicional, estoy padeciendo de dolores de cabeza, y tengo el estomago inflamado, como lleno de gases.