La menstruación dolorosa en un problema que afecta con frecuencia a muchas mujeres en edad fértil.
Una vez al mes, durante varios días seguidos, las mujeres fértiles expulsan vía vaginal la capa del útero llamada endometrio. Esto ocurre si el óvulo que se secreta por el ovario no es fecundado, es decir, si no existe embarazo.
La expulsión mensual del endometrio, en modo de sangrado, es lo que comúnmente se conoce por tener la regla.
Durante todos los años fértiles de una mujer es inevitable que esos días de menstruación lleguen. Para la mayoría de las mujeres no se trata de ningún problema, pues muchas de ellas sienten una liberación durante esos días, pero no todas tienen esa suerte.
Es conocido que un gran porcentaje de la población femenina ha experimentado, por lo menos una vez en su vida, una menstruación dolorosa. Al mismo tiempo, entre estas mujeres varias padecen de forma crónica dichos dolores, pudiendo llegar a inhabilitarse por completo durante los días más fuertes de la menstruación.
La cifra de mujeres que estiman los profesionales de la salud que sufren de dolor de regla no es nada discreto. Estamos hablando de nada más y nada menos que un 30% de las mujeres en edad reproductiva.
Esta prevalencia implica un número realmente elevado de mujeres que una vez al mes durante varios años padecen dolores en ocasiones limitantes.
En el Instituto Dra. Gómez Roig estudiamos los motivos del dolor de la regla para poder ofrecer una solución y mejora así la calidad de vida de las mujeres.
Qué es la menstruación dolorosa
Varios días antes de la menstruación las mujeres suelen sentir cambios a nivel físico y psicológico. Estos cambios hormonales son muy variados y pueden diferir de una mujer a otra. Pudiendo incluso llegar a ser distintos en la misma mujer en varios de sus ciclos menstruales.
Entre los cambios a nivel psicológicos más destacables y más recurrentes se pueden mencionar la tristeza, ansiedad o irritabilidad.
Por otro lado, a nivel físico se puede detectar una retención de líquidos más pronunciada de la habitual, náuseas o vómitos, diarrea, barriga hinchada o incluso dolor de cabeza. Pero uno de los más característicos es sin lugar a dudas el dolor en la zona baja del vientre. Este tipo de dolor abdominal o pélvico ha sido descrito por muchas mujeres como los llamados calambres.
De esta forma, cuando se hace mención a una regla dolorosa estamos hablando de los famosos calambres o dolores en la zona baja del vientre, los cuales pueden persistir en los primeros días de la menstruación.
Principales causas de la menstruación dolorosa
Para hablar de las causas que pueden provocar una menstruación dolorosa, dolor de regla o dismenorrea, es necesario hacer la distinción entre los dos tipos de dismenorrea que existen. La primaria y la secundaria, ya que no tienen el mismo origen.
Dismenorrea primaria
La dismenorrea primaria suele ser la más común entre las mujeres que padecen dolores menstruales, estamos ante un dolor denominado como “normal”, del cual no hay que preocuparse o alarmarse. Este dolor menstrual no está provocado por una enfermedad oculta o algún trastorno.
La principal causa de este dolor tan desagradable, y a la vez común, suele ser la alta concentración en el organismo de prostaglandinas.
Las prostaglandinas son generadas por el propio útero.
Estas sustancias son las responsables de que los músculos del útero realicen los movimientos causantes del dolor, concretamente realizan la contracción y relajación del mismo, dando como resultado los calambres tan molestos e indeseados.
En reglas generales este dolor suele ocurrir un par de días antes de que el período haga su aparición y tiene una duración relativamente corta, pero hay algunos casos en los que se puede extender varios días, haciendo realmente difícil que la mujer que los sufre pueda llevar una vida normal.
Un dato interesante es que conforme pasan los años, en el útero van disminuyendo los niveles de prostaglandinas, lo cual hace que cada vez las menstruaciones sean menos dolorosas.
Por otro lado, también es importante saber que muchas mujeres han reportado una gran mejoría tras haber dado a luz.
Dismenorrea secundaria
En cuanto a la dismenorrea secundaria, ésta por su parte suele aparecer en edades más avanzadas, por lo que no es habitual encontrar a mujeres jóvenes que la padezcan. En este caso hablamos de dolores que son causados por algún problema existente en el útero o en los ovarios, como pueden ser los miomas o la endometriosis.
Estos dolores son más fáciles de identificar, tanto por su intensidad como por la duración, los cuales suelen durar en muchos casos más l incluso que el propio periodo. Además, la menstruación dolorosa secundaria suele empeorar con el paso de los años al contrario que sucede con la dismenorrea primaria.
Cómo aliviar el dolor causado por la regla
El dolor referido a la dismenorrea secundaria debe ser tratado por médicos especialistas en este ámbito.
Se trata de un problema que debe ser medicado y supervisado por profesionales.
Por este motivo los consejos que se darán para aliviar la menstruación dolorosa harán referencia única y exclusivamente a la dismenorrea primaria.
- Practicar deporte. Los estudios han demostrado que la realización de deporte es muy beneficiosa para mejorar los dolores relacionados con el periodo. Entre los deportes más famosos o aconsejados para este fin se encuentran el yoga y la natación.
- Realizar ejercicios pélvicos.
- Aplicar calor en la zona inferior del abdomen: para ello se puede hacer uso de una almohadilla caliente o bien de una bolsa de agua clásica. Lo importante es aplicar calor en la zona pero sin llegar a provocar quemaduras o una sensación desagradable.
- Realizar masajes circulares con las yemas de los dedos en el abdomen bajo, sin llegar a ejercer presión.
- Tener una dieta equilibrada junto con una ingesta alta de líquidos. Es importante mantener una hidratación adecuada durante los días de la menstruación para evitar dolores tanto de cabeza como menstruales.
- Tomar suplementos alimenticios de calcio, magnesio y de vitaminas, concretamente de vitamina B6.
- Si se sufre de sobrepeso es necesario y una prioridad bajar de peso ya que esto suele ser un precursor de los dolores menstruales.
- Tomar medicamentos del tipo ibuprofeno o paracetamol para disminuir el dolor en casos puntuales.
Cuándo acudir al Ginecólogo
Sufrir dolores menstruales es algo normal. Como se decía al inicio todas las mujeres del mundo han sufrido una menstruación dolorosa en algún momento de su vida pudiendo ser algo habitual.
No obstante, es muy importante prestar atención a las señales de alarma y acudir al ginecólogo al primer signo de que algo no está funcionando correctamente.
La pregunta aquí es ¿cuándo acudir al ginecólogo? En este caso será necesario concertar una visita si se sufren algunos de los siguientes síntomas:
- Los calambres en el abdomen no disminuyen, en vez de eso aumentan en intensidad y dolor.
- El dolor persiste incluso después de haber finalizado la menstruación.
- Los medicamentos específicos para el dolor menstrual no ayudan.
- El dolor menstrual es tan fuerte que interfiere con tu rutina, haciendo que sea necesario estar en cama varios días.
- La menstruación va acompañada de fiebre.
- Si detectas un aumento de flujo vaginal y/o va acompañado de un olor desagradable.
Algo muy importante en este tema es llevar un registro de los días exactos en los que la menstruación empieza.
Esta práctica es algo que muchas mujeres aún a día de hoy no hacen y resulta realmente necesario e imprescindible para los ginecólogos a la hora de empezar a trazar el camino que les llevará a la causa de los problemas.
Cómo se puede ver, la menstruación puede ser más compleja de lo que muchas personas piensan, aunque es bueno prestar atención a los cambios que sufre nuestro cuerpo. Al mismo tiempo, es de vital importancia no obsesionarse a la mínima ya que el estrés es una de las peores ayudas que existen para nuestras preocupaciones.
Si tienes una menstruación dolorosa no te conformes y consulta a nuestro equipo para que te ayude a encontrar la solución correcta.
Entradas de interés
- Sobre el Autor
- Últimas Entradas
Jefa de Servicio de Obstetricia y Ginecología en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona. Profesora Agregada de Obstetricia y Ginecología y Coordinadora del Sexto Curso de Medicina en la Universidad de Barcelona, UB. Directora del Instituto Dra. Gómez Roig y Coordinadora de Procesos Obstétricos y Ginecológicos de la Clínica Corachan en Barcelona.
Los comentarios están cerrados.